Actuaciones de control e inspección de los productos, bienes y servicios destinados a los consumidores y usuarios en cualquier fase de comercialización, con el fin de comprobar su adecuación a la legislación vigente en materia de consumo.
Se trata de comprobar su adecuación técnica, higiénico-sanitaria, de seguridad y comercial, garantizando así los derechos básicos de los consumidores.
Se realizarán 2 tipos de actuaciones:
- Actuaciones programadas, campañas, consistentes en inspecciones de sectores específicos, con el fin de comprobar el grado de cumplimiento de la normativa que le es de aplicación.
- Inspecciones por denuncia: como consecuencia de irregularidades puestas en conocimiento de la administración a través de reclamaciones de los consumidores y que pudieran ser constitutivas de infracción en materia de consumo o inspecciones por propia iniciativa de la administración.
El servicio de inspección además participa en la red de alerta de productos inseguros, que es un sistema basado en el intercambio rápido de información entre las administraciones encargadas del control de mercado, sobre un producto que pueda suponer un riesgo para los consumidores ya que no cumple la obligación de estar fabricado conforme a una serie de requisitos de seguridad y de incluir una información mínima al consumidor (datos de la empresa, las instrucciones de uso, etc.)
Los fabricantes y distribuidores deben colaborar con las autoridades en la retirada del producto afectado o la subsanación del problema. Si es el propio fabricante o distribuidor el que detecta un problema de seguridad en sus productos, la legislación le obliga a notificarlo inmediatamente.