El servicio municipal de matrimonios civiles ha suspendido las reservas de bodas mientras dure el período de ‘cuarentena’ adoptado para combatir la propagación del COVID-19. Las reservas con fecha ya cerrada se mantienen, pero con unas condiciones especiales siguiendo las exigencias de las autoridades sanitarias.
El enlace se celebra a puerta cerrada, permitiéndose exclusivamente el paso de cuatro personas al Ayuntamiento: contrayentes y dos testigos, además de la concejala o concejal que oficia el acto.
Ante este nuevo escenario, se da la opción de aplazar la ceremonia por otra fecha futura libre, sin coste añadido alguno de tasa, pues vale la pagada en su día.