El Servicio de Emergencias de la Comunidad de Madrid (112) ha informado que se activa el nivel de alerta 2 por las altas temperaturas, que hoy alcanzarán los 39,5 grados.
Este aviso se establece cuando los termómetros marcan más de 36,5 grados centígrados durante varios días seguidos.
En la web de la Comunidad se pueden seguir las alertas regionales que se producen en las jornadas de intenso calor: aqui.
RECOMENDACIONES
Es importante protegerse del intenso calor que puede ocasionar efectos perjudiciales en la salud. Los problemas más habituales de la exposición prolongada al sol tienen que ver con el agotamiento y la aparición de calambres. Las personas mayores, con enfermedades crónicas y menores deben protegerse especialmente en las próximas semanas veraniegas.
El golpe de calor es la consecuencia más grave que provocan las elevadas temperaturas. Se caracteriza por un aumento rápido de la temperatura corporal que puede causar secuelas importantes e incluso la muerte si no hay un tratamiento inmediato, según explican desde la Concejalía de Salud del Ayuntamiento de Rivas.
El golpe de calor se puede reconocer por una temperatura del cuerpo alta -de hasta 40ºC-, piel caliente, enrojecida y seca -sin sudor-, dolores de cabeza, nauseas, somnolencia, sed intensa, confusión, convulsiones y pérdida de consciencia.
¿Cómo evitarlo?
Protegiéndose del calor:
No sea imprudente. En las horas más calurosas del día se recomienda no salir a la calle. Si tiene que salir, permanezca a ser posible a la sombra.
Cúbrase la cabeza. Los sombreros y gorras evitan las insolaciones. Procure vestirse con ropa ligera y de colores claros.
Cierre las ventanas y persianas para evitar la entrada del calor y eche los toldos de las fachadas expuestas al sol.
Proteja a su bebé. Es muy importante evitar los efectos nocivos del calor en bebés y niños pequeños. Tome todas las precauciones y consulte a su pediatra.
Ayude a las personas mayores. Si viven solas, deben estar acompañadas y ser ayudadas cada día.
Refrescándose:
Beba líquidos. Beba bastante agua y con frecuencia (al menos 2 litros diarios), aunque no sienta sed. Su cuerpo necesita agua para mantenerse hidratado. Evite bebidas muy azucaradas, alcohólicas, café, té y cola.
Coma fresco y sano. Aumente el consumo de frutas de verano y verduras, gazpachos ligeros, ensaladas frías y cualquier tipo de alimento rico en sales minerales. Evite las comidas calientes.
Dúchese frecuentemente durante el día o refrésquese con paños húmedos.
Permanezca durante el mayor tiempo posible dentro de su casa en la sala más fresca.
El frigorífico debe estar en perfecto estado de funcionamiento.
Si en su domicilio no hay un sitio fresco o con aire acondicionado acérquese, al menos durante dos o tres horas, a un centro refrigerado cercano (centro comercial, centros de la tercera edad, biblioteca….).
Infórmse en su centro de salud:
Sobre todo en caso de estar tomando algún medicamento y/o notar síntomas no habituales en esta época, no dude, en acudir a su centro de salud y consultar a su médico o enfermera.
Si por diversas causas se encuentra ante una emergencia causada por el calor, solicite ayuda en el teléfono 112 y en espera que llegue el servicio de urgencia:
Tumbe a la persona afectada en una zona fresca.
Refrésquele rápidamente el cuerpo; retírele la ropa, aplíquele compresas frías, sábanas mojadas, abanicos o cualquier otro método para favorecer la perdida de calor corporal.
MUY IMPORTANTE: Nunca debemos dar de beber si la persona afectada está inconsciente.