Entrevista: Patricia Campelo Fotografía: Luis García Craus.
Ha recalado en Rivas por segundo año para apadrinar la Legua Solidaria, una carrera que busca recaudar fondos para los saharauis que viven refugiados en el desierto desde hace más de 40 años. El carácter solidario del atleta Chema Martínez (Madrid, 1971) no conoce fronteras y atiende a una amplia lista de causas justas. El deporte, según reconoce el laureado fondista, logra mejores personas, con ganas «de hacer».
En su medallero cuelgan oros y platas de campeonatos y maratones por todo el mundo. Desde su retirada, en 2013, se dedica con éxito a la comunicación deportiva. «Me gustan los retos», reconoce.
Es el segundo año que viene para apadrinar esta carrera, ¿cómo le llegó la petición?
Ya llevo unos años colaborando en una maratón en la que empecé a contactar con gente que está en la causa saharaui. Trato de ayudar en todas las causas que mi tiempo me permite. El deporte tiene estas cosas, te permite poner tu granito de arena. Es gente que lleva 40 años sumida en un problema de abandono, que pasan los años viviendo en los campamentos y que el conflicto no se resuelve. Simplemente esto es poner un poco el amplificador para que lo conozca más gente y que algún día puedo llega la solución.
¿La conjunción de los valores deportivos y solidarios logra una mayor incidencia del mensaje?
El deporte es un vínculo increíble por lo que requiere de esfuerzo, perseverancia, voluntad¿ Todos esos valores hacen que la gente que practique deporte se sienta con ganas de hacer, de participar y colaborar en iniciativas como estas. Quienes son capaces de dar cosas en la vida son personas aficionadas al deporte. Y aquí en Rivas pues es el segundo año que se hace [la Legua Solidaria], y el pueblo se vuelca, igual que las instituciones y patrocinadores. También, cuando hay gente que lo pasa mal, el deporte puede ayudar, es una buena vía de escape y cada vez hay mas gente que lo hace.
Desde el mundo del deporte parece que se apadrinan más causas relacionadas con la salud y en menor medida las que tienen que ver con la política, los derechos humanos.
Es cuestión de tiempo también, de prioridades. Creo que la gente al final es solidaria independientemente del motivo. Hay personas que se sienten involucradas con unas causas que les provocan mas motivación que otras, también depende de lo que vives en tu entorno. Si tienes cerca gente en contacto con el mundo saharaui está claro que te llega más esa causa. Si tienes gente con alguna discapacidad te llama más eso. Todo depende de los ojos con los que veas la realidad.
La salud toca mas de lleno a los deportistas.
Es lo que mas te afecta en tu día a día.
En 2013 se retira de la competición de alto nivel, ¿cómo ha sido su vida desde entones?
Ha cambiado mucho. He dejado de tener un objetivo de pelear con los mejores, ya no voy a los grandes campeonatos y he asumido que ya no soy el que era a nivel físico. Voy a cumplir 44 años, mi plenitud la dejé.
¿Frustra ese sentimiento?
No, no. Es algo natural. Lo primero es asumirlo. Cuando dejas de ser deportista de alto nivel primero hay que asumirlo. En mi caso han sido 18 año, por tanto suficiente. Me siento satisfecho y la vida continúa.
Dejó cerrada esa etapa.
Sí, ya pasó. Fue una etapa muy bonita en mi vida pero no se acaba el mundo. Tienes que ser una persona normal y corriente; soy padre de familia, trabajo de periodista, sigo teniendo nuevos retos y seguiré siendo runner toda mi vida, no concibo mi vida sin salir a correr cada día. Sí que ha cambiado mi vida y lo que ahora me mueve son otro tipo de retos que me tengan enganchado cada día.
¿Como la comunicación en torno al deporte?
Me gusta que mi vida gire en torno al deporte, me gustan los retos, sigo trabajando en la radio, el blog¿ Mi mujer también ha sido deportista, mis hijos, es algo vital en nuestras vidas.
¿Qué ubicación laboral relacionada con el deporte tiene un atleta cuando deja de competir?
El problema clave es que cuando están dedicándose a entrenar se olvidan un poco de su formación. A los chavales jóvenes que me cruzo se lo digo, «tienes que formarte», independientemente de que seas deportista de alto nivel. Una persona formada tendrá más posibilidades que quien no lo esté. En mi caso ha sido clave estudiar: acabé mi carrera, hice tres master, un postgrado. Eso es lo que te garantiza estar preparado cuando dejas de ser deportista de alto nivel, que es una situación que tiene una fecha de caducidad para todos los deportistas. Quien se olvida de este aspecto se encuentra con problemas cuando termina su carrera deportiva. Cuando lo dejas eres uno más, y todo dependerá de cómo te hayas preparado.
¿Está relacionado con el éxito mediático de un deporte con las vías laborales que se le abren o no al ex deportista de élite?
Todo es muy relativo porque al final todo el mundo se tiene que reincorporar al mundo laboral, no puedes estar el resto de tu vida sin hacer nada. Lo común a todos los deportes es que existe una vida después del deportista, aunque el deporte seguirá formando parte de tu vida pero tendrás que hacer otras cosas. Todo depende de cómo te lo hayas currado.
Sobre la moda runner: antes íbamos a correr, ahora somos runner¿
Y te tienes que hacer una foto [risas].
¿A qué se debe este cambio de tendencia?
Posiblemente la gente se preocupa por llevar una vida sana. Uno quiere sentirse bien y para ello realizar una actividad física es clave, tienes que cuidar hábitos alimenticios, llevar una vida ordenada y el deporte te ayuda a conseguirlo. Una vez que lo experimentas y lo vives te das cuenta de que funciona. Y correr es un deporte que no necesita mucho tiempo, si montas en bici necesitas muchas horas, te tienes que desplazar, etc. Y ponerte unas zapatillas y salir a correr te lleva menos tiempo y puedes aprovecharlo un poco más. Te ayuda a aprovechar todo tu tiempo.
