Los presupuestos municipales para el presente año permitirán mantener la cantidad y calidad de servicios, aplicar políticas sociales para paliar las consecuencias de la crisis, llevar a cabo políticas activas de empleo y mantener en buenas condiciones las infraestructuras de la ciudad.
En el Pleno Municipal, celebrado el pasado 30 de abril, quedaron aprobados los Presupuestos de nuestra ciudad para el presente ejercicio 2013.
La razón por la que se han cerrado ya teniendo avanzado el año ha sido la incertidumbre que se ha generado desde el Gobierno central una vez que éste anuncia, a finales de 2012, la modificación de la Ley de Bases de Régimen Local.
El borrador del anteproyecto de Ley, sin embargo, no fue aprobado por el Consejo de Ministros hasta el 22 de febrero. El avance de la reforma que se quiere llevar a efecto supone un cambio de la configuración de los servicios municipales y puede suponer la retirada de algunas competencias a los ayuntamientos.
La puesta en marcha de esta importante reforma se retrasa como consecuencia de las protestas que ha provocado en el seno de la FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias), así como en la mayoría de los más de 8.000 ayuntamientos, grandes y pequeños, que existen en la actualidad en el Estado.
Independientemente del curso que adopte la propuesta reformista del Ejecutivo de Rajoy, las prioridades para el gobierno ripense se centran en equilibrar los ingresos con los gastos para garantizar una gestión sostenible.
El presupuesto municipal para 2013 será de 94.755.215 euros, levemente inferior a los ingresos previstos, que se sitúan en 95.129.754 euros. Se ha planificado con el propósito de mantener los servicios públicos que más demanda la ciudadanía, así como el mantenimiento de políticas sociales básicas, que en estos tiempos de crisis se hacen aun más necesarias, para las que se destinará una partida de 6.184.805 euros.
El Presupuesto municipal para 2013 mantiene los servicios públicos más demandados por la ciudadanía
«El primer objetivo que pretendemos cubrir con estos nuevos presupuestos es sostener la calidad de los servicios, que es la principal demanda que la ciudadanía ripense le hace a este ayuntamiento», afirma José Masa, alcalde de Rivas.
Desde el inicio de la crisis ése ha sido el objetivo básico; la defensa de los servicios mediante la adaptación de los recursos a este nuevo tiempo económico. Esa optimización de recursos se ha traducido en una reducción de gastos en determinadas partidas, algo que lleva ocurriendo desde hace cuatro años. En el año 2013, por poner un ejemplo, el gasto en personal se rebajó en 700.000 euros con respecto al ejercicio anterior
SERVICIOS PÚBLICOS
Para Ana Mª Reboiro, edil de Hacienda, esa ha sido la línea prioritaria. «Nuestra ciudad tiene una cartera de servicios públicos amplia y de alta calidad; algo que demanda y demuestra con su uso activo nuestra ciudadanía. Es nuestro principal patrimonio y por eso cualquier proyecto de gestión de nuestros recursos pasa por defender los servicios y no olvidar la protección social en momentos tan difíciles».
Otro de los ejes que tienen un reflejo especial en los presupuestos es el de mejorar la conservación de la ciudad. La limitación en las inversiones no puede suponer un deterioro de las vías públicas y de las instalaciones en las que se prestan los servicios. El área de Ciudad Sostenible contará con una partida de 16.716.073 euros, lo que permitirá, entre otras muchas cosas, el cuidado de nuestras infraestructuras.
«La ciudad tiene que seguir estando en buenas condiciones. Los parques, las vías públicas y las infraestructuras recibirán el mantenimiento necesario para seguir prestando el servicio que daban hasta el momento», añade Masa.
FOMENTO DEL EMPLEO
El tercer eje tiene que ver con la inversión en políticas activas de empleo, un apartado que ha sufrido en 2013, con especial dureza, los recortes presupuestarios de la Comunidad de Madrid.
En las cuentas municipales para el presente año se contemplan partidas para promover y facilitar la búsqueda de empleo a las y los parados ripenses, estimular el desarrollo económico local y fomentar el acceso a un trabajo como paso necesario para paliar las consecuencias de la crisis.
Rivas prima la inversión en políticas activas de empleo a las que la Comunidad de Madrid ha sometido a un severo recorte
Esta competencia, la del empleo, la asume el Ayuntamiento ante la falta de iniciativa de la administración regional.Otra parte de los presupuestos se destina al sostenimiento de las responsabilidades financieras. El pasado año, éstas se vieron aumentadas con la puesta en marcha por parte del Gobierno central del Plan de Pago a Proveedores que entre otras cosas ha aumentado la carga financiera de los municipios en beneficio de los bancos.
El Gobierno ha obligado a los ayuntamientos a pagar a los proveedores con créditos que tienen un 6% de interés que conceden una serie entidades financieras que obtienen ese dinero al 1% en el Banco Central Europeo.
Las limitaciones en los ingresos que genera la crisis se han visto agravadas por la deuda que mantiene con el ayuntamiento la Comunidad Autónoma de Madrid y que se acerca a los 15 millones de euros. Se trata de pagos por servicios prestados y convenios que la Comunidad no ha abonado. Ese lastre también determina el margen de maniobra de las arcas municipales. Como también lo hace la rebaja, en un 30% este año, de la aportación de la Comunidad venía prestando para pagar a los agentes de la Policía Local que pertencen a las BESCAM.
INGRESOS Y AHORROS
Con esas cortapisas, las decisiones tomadas en estos Presupuestos de 2013 suponen, por ejemplo, un ahorro de 500.000 euros en asistencias técnicas que prestaban empresas especializadas que colaboraban con el Ayuntamiento.
También hay que recordar que los ingresos municipales se han visto incrementados por el aumento de IBI, dictado por el Ministerio de Hacienda, que dentro de su programa de actualización del valor catastral aumentará, como en el resto de los municipios, progresivamente.
La Comunidad de Madrid está llevando una política restrictiva en cuestión de servicios a la ciudadanía. La retirada de los fondos para teleasistencia es un caso claro. El Ayuntamiento de Rivas responde dotando con fondos municipales un servicio que genera bienestar, agiliza y facilita el cuidado de personas mayores.
Dentro del ajuste, los presupuestos garantizan la viabilidad de los servicios, la continuidad de políticas sociales destinadas a paliar los efectos de la crisis, las inversiones para el mantenimiento de la ciudad, la puesta en marcha de políticas de empleo y una clara apuesta por los servicios públicos.


