«Es lo mejor que me ha podido pasar para aclarar problemas personales y familiares”. Con ese positivismo valora Rodrigo, un joven de 27 años, su paso por el Servicio Municipal de Asesoramiento Integral a la Juventud. Se trata de un recurso público dirigido a la población juvenil: hasta 25 años en el caso de las mujeres y 30 en el de hombres. En él se ofrece asesoramiento y acompañamiento a quienes enfrentan dudas o dificultades: ya sean de ámbito emocional, de conducta, problemas relacionados con sus habilidades sociales, el entorno familiar o educativo, relaciones de pareja…
Daniela, de 22 años, es otra usuaria: “En mi caso necesito superar cosas del instituto, situaciones que no he sabido afrontar, tanto familiares como de mi vida social”, explica. Por respeto a su intimidad y para preservar su identidad, los nombres de ambos jóvenes son ficticios, y tampoco se explica detalladamente su problemática.
Consciente de la importancia de este servicio, que muy pocos ayuntamientos de la Comunidad de Madrid ofrecen con recursos propios, la Concejalía de Educación, Infancia y Juventud decidió reforzarlo a finales de 2021, incrementando la atención: se ha pasado de 41,50 horas semanales a 56,25. También se ha ampliado la franja de edad, abriendo el abanico a chavales de 5º y 6º de primaria (10 y 11 años; antes se atendía a partir de 12).
Según la memoria de actividad, en 2021 se atendieron a 180 personas, con 132 expedientes nuevos. Fue el segundo año con mayor número de citas (965), tan solo superado en 2018 (1.039). La pandemia con su confinamiento (y sus repercusiones en la salud emocional) y el incremento de horas semanales pueden explicar ese aumento.
Eliana Troncoso es una de las psicólogas de la asesoría, donde actualmente atienden tres profesionales de lunes a jueves en el Área Social del Parque de Asturias (9.30-14.00 y 14.30-20.00). Tanto la adolescencia como la primera juventud son tramos cruciales en la vida de la persona. Eliana lo resume bien: “Es una etapa compleja y de exploración. Se producen muchísimos cambios, tanto a nivel hormonal, biológico, emocional o en el pensamiento. Cuando somos adolescentes buscamos qué podemos ofrecer al mundo y qué te puede ofrecer el mundo a ti. Y, a veces, nos podemos sentir un poco perdidos, y más en esta sociedad que no siempre te lo pone fácil”.
Pero la adolescencia y primera juventud también implica una “energía buenísima para hacer cambios”, continúa Eliana. Pautar y acompañar, colocando y canalizando adecuadamente esa energía para encontrar un rumbo más certero, es la finalidad de esta asesoría.
Julio Escudero es otro de los psicólogos. Describe un caso reciente: “Hace poco llegó un joven que decía tener mucha ansiedad. No podía dormir por las noches. En cuanto nos sentamos y ordenamos un poco qué le pasaba, cómo era su vida a nivel familiar y académico, descubrimos que estaba teniendo alguna dificultad con su padre. Desde el momento en el que conseguimos entender a su padre y entender la situación desde su perspectiva, pudimos resolver y tomar decisiones. Y ya estamos apreciando que los síntomas ansiosos se reducen”.
Procede aquí una aclaración: la función del servicio no es la atención psicológica al uso: “Cuando detectamos un caso de ese tipo [trastorno de la conducta alimentaria, depresión o adicción, por ejemplo], se deriva al servicio municipal correspondiente o de salud mental”, matiza Julio.
Entre las principales demandas, despuntan tres tipos de casos, todos por encima del 20%: relaciones familiares (22,27%), estado de ánimo (21,77%) y ansiedad (21,60%). Le siguen problemas de autoestima (11,22%), relaciones con iguales (6,41%), hijas e hijos de mujeres víctimas de violencia machista (4,64%) y prevención de problemas de conducta con adolescentes (4,47%).
EL 71%, CHICAS
Un dato llama la atención: el 71% de personas usuarias son chicas, por solo un 29% de chicos. Se trata de una tendencia histórica. Y aunque no hay estudio científico que alumbre una explicación certera, Julio apunta una posible causa: “La inteligencia emocional sigue siendo un reto para buena parte de la población masculina”. Pero sí se observa un incremento en la llegada de chicos. “Cada vez se animan más a emprender ese proceso de identificar emociones, ver cómo se sienten y trabajar en ello”, asegura Julio.
Desde la asesoría se lanza un mensaje a madres y padres. “Les animamos a que se acerquen a sus hijos e hijas, que traten de comprender cómo se sienten y valoren el malestar o sufrimiento que puedan estar pasando en un momento de sus vidas”, recomienda Julio. “La madre, el padre o la persona tutora deben tratar de conectar con el adolescente que fueron, recordar qué les pasaba en aquella época. La de veces que hemos estado perdidos y lo que nos pudo costar encontrar el camino”, añade Eliana.
En ese camino, que se asoma a buen destino, se encuentra Rodrigo, el joven que, al principio de este reportaje, reconocía que acudir a este servicio “es lo mejor” que le ha podido pasar “para aclarar problemas personales y familiares”.
“En mi caso agradezco mucho la ayuda prestada. Te ofrecen pautas y te marcan objetivos”, explica. Daniela también progresa por esa vereda: “Desde que empecé hasta ahora he notado un cambio muy grande. No te sientes sola, te guían y eso ayuda a llevarlo. Eliana ya me ha trasladado que me ve bastante mejor. No creo que me queden muchas más sesiones”. Y concluye, casi con precisión filosófica: “A veces, buscar ayuda no te hace menos fuerte, sencillamente te ayuda a hacerte”.
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ASESORÍA INTEGRAL A LA JUVENTUD
Área Social del Parque de Asturias
Teléfono: 91 666 69 07-8.
Correo: aintegral@rivasciudad.es