- Texto: Patricia Campelo e Irene Piedrabuena// Fotos: Luis García Craus
Un denominador común caracteriza a quienes plantan cara a la cruel realidad del desempleo: el destierro del concepto ‘parado’. Víctimas de la crisis del capitalismo, que ha destruido de manera sistemática puestos de trabajo y precarizado el mercado laboral, han buscado todos los medios a su alcance para no conformarse con las escasas o inexistentes ofertas de las oficinas regionales de empleo, y han convertido el pesimismo en una ventana abierta a la esperanza. Es el caso del grupo de diez mujeres ripenses que, desde principios de enero, trabajan y se forman en el Ayuntamiento gracias a una iniciativa municipal que se prolongará hasta finales de junio.
64 demandantes de empleo de larga duración participan en este programa como personal de archivo, de mantenimiento y dinamizadores culturales. A cambio, obtienen un salario íntegro que abarca también las horas de formación, a jornada completa y en base a su categoría laboral. Al terminar, obtendrán un título equivalente a los de formación profesional.
Las mujeres que trabajan en el archivo gracias a este proyecto han sido seleccionadas de entre el colectivo que mayor dificultad tiene para acceder al mercado laboral: madres, entre 30 y 50 años y con escasa formación. Algunas de ellas fueron arrinconadas por el sistema cuando tuvieron que criar a sus hijos. Otras, con varios menores a su cargo, no pudieron hacer frente a los costes de los centros para la infancia, y las que superan los 45 sienten el rechazo de la edad.
«Tuve que dejar mi trabajo porque no sabía que tenía que pedir guardería antes de que naciera el niño, y me quedé sin plaza», relata Laura Ramos, de 31 años y con estudios de secretariado informático en academia. «Con hijos tienes que compaginar, porque no puedes salir a trabajar y que el dinero no llegue a casa porque lo estás gastando en que tus hijos no estén contigo», argumenta.
«Yo me fui de mi último trabajo cuando me quedé embarazada porque me hicieron la vida imposible», denuncia Olga Chisvert (41 años). Tras ocho años trabajando de administrativa en una empresa, dejó su puesto, crió a sus dos hijas y después comenzó una intensa búsqueda de empleo. «Me he pateado el polígono. Cada día reviso ofertas por internet y mando mi currículo, estoy apuntada en la Agencia de Colocación de Rivas y en la oficina regional de empleo», enumera Olga.
«Es injusto porque si tienes hijos tienes unas obligaciones, y eso es lo primero por lo que te echan atrás en las empresas. Nosotras mismas a veces nos preguntamos: ¿A dónde vamos?», lamenta Natacha Durán (30 años), que empezó a trabajar a los 14 años y hoy en día es madre de una niña de 3.
El número de mujeres desempleadas, entre los 25 y 45 años, en Rivas es de 1.532 frente a 1.158 hombres
Precisamente, las cifras del paro en Rivas corroboran estos testimonios y dan la medida de la falta de aceptación del mercado laboral hacia las mujeres con edades comprendidas entre los 25 y los 45 años. El número de mujeres desempleadas en ese rango es de 1.532 frente a 1.158 hombres. A partir de los 45 años, las mujeres también registran mayor tasa de desempleo en Rivas: 1.421, frente a los 1.101 hombres. En cambio, el dato de invierte en menores de 25 años. En este caso, hay 199 mujeres y 319 hombres en desempleo. Todo, según datos de la Concejalía de Desarrollo Económico, Empleo y Formación a 31 de enero.
CONTRA LA PRECARIEDAD JUVENIL
Otro perfil perjudicado en estos tiempos es el de jóvenes menores de 30 años que accedieron al mercado laboral en plena crisis económica. Recién formados, algunos sin experiencia previa, y en un contexto de elevadas cifras de paro, la incertidumbre se cierne sobre ellas y ellos. Con el objetivo de disipar de alguna manera un horizonte de desempleo continuado, 75 jóvenes participan desde noviembre en el programa de prácticas becadas del Consistorio. Realizan las labores en empresas relacionadas con su formación y experiencia previa, y cotizan a la seguridad social.
«La población joven de Rivas presenta un nivel de cualificación más alto que la media de la región, pero tiene escasas oportunidades de acumular experiencia que facilite su acceso al mercado laboral», apunta Luz Matas, concejala de Desarrollo Económico, Empleo y Formación.
Marcos Campo, de 25 años, encaja bien en este perfil de jóvenes cualificados que tienen que afrontar la precariedad laboral. Participa en el programa de prácticas becadas del Ayuntamiento con una estancia en la plataforma de televisión online Próxima TV. Licenciado en Comunicación Audiovisual, se encarga de la grabación y edición de vídeos. Antes, había buscado trabajo en todo tipo de sectores, sin éxito. Terminará sus prácticas a mediados de marzo y espera poder hacer alguna colaboración con la empresa después.
EMPRENDIMIENTO
La otra vertiente de las iniciativas que batallan contra el concepto ‘parado’ la ofrece el autoempleo, a veces como única vía ante la escasez de trabajo por cuenta ajena. El servicio municipal RivasPuntoCoop asesora y acompaña a quienes desean poner en marcha proyectos emprendedores. En seis meses de funcionamiento han utilizado este espacio 100 personas y se han constituido tres sociedades. «Asistimos a uno de los talleres de RivasPuntoCoop y nos ha parecido muy interesante porque nos hemos situado más en el contexto del cooperativismo. Nos ha ayudado a concretar y a tener una idea más clara para funcionar», asegura una de las participantes y socia de la cooperativa Desván Social, Isabel González.
Trabajadores de Telemadrid expulsados por el ERE, en enero de 2013, asistieron al mismo taller para ver si era posible convertir su asociación TMEX en cooperativa. «Fue una gran oportunidad; descubrimos cómo teníamos que organizarnos siendo una asociación por si algún día queríamos ser cooperativa. Nos sirvió para darnos cuenta de que, aunque formemos cooperativa, tiene que existir una pequeña jerarquía: con un consejo rector rotatorio, etc», explica uno de los socios, Luis Azanza.
En Rivas, además, existen espacios como el laboratorio social Rivas Lab, las sesiones de trabajo Networking que sirven para conectar personas con inquietudes similares y el Centro de Iniciativas Empresariales, que alberga despachos a bajo coste para los emprendedores que acaban de iniciar su camino. Además, próximamente, el Ayuntamiento inaugurará la Comunidad de Emprendedores de base tecnológica -con especial atención a la economía verde- en el edificio municipal CEFOR II. Se busca promover así la creación de pequeñas empresas y autónomos, y contribuye a especializar la economía local con actividades de alto valor añadido y tecnologías de última generación.
La cooperativa ConectaLab, que diseña servicios y herramientas de software y hardware libre, convertirá el CEFOR en un centro de innovación abierta. «El objetivo es generar un entorno para el autoempleo», anuncia Javier Catalá, socio de ConectaLab. Todos los ejemplos de ciudadanas y ciudadanos citados en este texto ilustran ese otro modo de afrontar el amargo trago del desempleo, y esperar de forma activa que se termine de abrir alguna puerta.
Mientras eso sucede, el Consistorio acompaña con iniciativas que contribuyen a mejorar la empleabilidad y a conectar personas con ideas. «El desaliento, la desmotivación y la frustración de las personas que sufren el desempleo deben combatirse con políticas activas de empleo novedosas, que pongan en valor su talento y sus competencias», subraya la edil Matas.
La ciudad de Rivas (80.000 habitantes) registró una cifra de desempleo el pasado enero de 5.730 ripenses. El pico se alcanzó el pasado octubre, con 5.849 vecinos y vecinas sin trabajo y, desde entonces, los números han descendido ligeramente. Aún así, el punto de partida es pesimista y, por ello, el Ayuntamiento pone en marcha iniciativas dentro de las escasas competencias que tienen las administraciones locales para fomentar políticas activas de empleo.
En el caso de Rivas, el Consistorio ha explotado esta vertiente y proporciona toda la ayuda que le permiten sus competencias. Así, últimamente han comenzado clases de chino para desempleados, un concurso para premiar proyectos innovadores en el área de la sostenibilidad y dos cursos para obtener certificados de profesionalidad.
LANZADERA DE EMPLEO
Como novedad, este mes arranca la Lanzadera de Empleo [LEES] de asesoría y ‘coach’ [entrenamiento] para jóvenes ripenses que lleven más de un año sin trabajo e inscritos en las oficinas regionales de empleo. Este último proyecto llega a Rivas gracias a la acuerdo con la fundación Acción Contra el Hambre y al apoyo de la fundación Santa María la Real, que ha diseñado la metodología de la LEES, y que está presidida por el arquitecto y conocido dibujante del diario ‘El País’ José María Pérez ‘Peridis’.
Rivas es la primera ciudad de las tres de la Comunidad de Madrid que acoge esta asesoría dirigida a hombres menores de 30 años y mujeres de menos de 35. Con el apoyo de un ‘coach’ [entrenador], un grupo de 20 jóvenes con distinta cualificación trabajará en equipo para identificar sus posibilidades y mejorar su empleabilidad. El objetivo final reside en la realización de búsquedas activas de empleo y en generar proyectos entre emprendedores. La Lanzadera se prolongará ocho meses. Hasta el 10 de marzo se pueden presentar las solicitudes en el registro general del Ayuntamiento de Rivas.
CONOCE A LOS PROTAGONISTAS:
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-Cuatro cooperativas que han pasado por RivasPuntoCoop. Leer.
-Dos jóvenes que participan en el programa de becas en empresas. Leer.