- Texto: Patricia Campelo e Irene Piedrabuena //Foto: Jesús Pérez.
Jorge López (62 años) asegura que tan solo pone «un granito de arena» para mejorar su ciudad. Pero a lo largo de su trayectoria ha levantado ya una montaña entera. Este vecino de Pablo Iglesias encarna la memoria viva del activismo de barrio. Llegó a la cooperativa del oeste de la ciudad a principios de los 80 y, desde entonces, pelea por tener la mejor ciudad posible.
Llegó a Pablo Iglesias a principios de los 80 y desde entonces pelea por tener la mejor ciudad posible
«Me preguntan por qué lo hago y respondo, ‘porque aquí es donde vivo», resuelve. A mediados de los 80 logró con su perseverancia que no se alzara una gasolinera en un paraje a la entrada del municipio por el kilómetro 12. «Fui una noche y planté más de 20 árboles; vino un guardia civil a decirme que no podía hacer eso en un terreno público; yo le expliqué los motivos, me comprendió y se marchó», relata Jorge satisfecho. Después se encargó él mismo de conservar las especies, cargando cubos de agua desde lejos para el riego.
PARQUE MONTARCO
Su activismo lo canaliza ahora en los grupos de trabajo de las comisiones de barrio. «Vamos a hacer un monográfico para la zona del parque del Montarco», avanza. También, proponen nuevos parques en La Luna y hacer del Cerro del Telégrafo una propuesta común a los tres barrios de Rivas. Los dinamizadores del Oeste se caracterizan por el activo papel que juegan. Jorge invita a los jóvenes a tomar el testigo. «Se necesitan muchas manos para hacer muchas cosas».