NOTICIAS

Rivas: tierra para una carrera de montaña

750 participantes se citarán en la segunda edición del Trail Natura Rivas: hablamos con tres protagonistas (aviso: prueba pospuesta por el COVID-19).

Rivas: tierra para una carrera de montaña
Participantes en la primera carrera Trail Natura Rivas, en 2019, por la pinada del cerro del Telégrafo.

AVISO: prueba pospuesta hasta nueva fecha ante las medidas extraordinarias adoptadas para hacer frente al coronavirus COVID-19.

Texto: Nacho Abad Andújar

«Correr por el monte emociona». «A Rivas voy aunque esté coja [por una lesión]». «Es un circuito divertido». Así responden quienes volverán a colgarse un dorsal para disfrutar de la carrera de montaña Trail Natura Rivas, que se celebra el sábado 21 de marzo. La prueba trenza un recorrido por la pinada y los cortados del cerro del Telégrafo, con vistas aéreas al entorno natural de la vega del río Jarama y las lagunas de Velilla, al norte del municipio.

La cita reunió en su primera edición de 2019 a 420 participantes (un 25% mujeres). El club local Sons of Running, organizador del evento, quiere llegar este año a 750. Vero Suárez, de 29 años y trabajadora de banca ética y sostenible, cogerá un vuelo en Gran Canaria, donde vive, para resoplar de nuevo por la hojarasca ripense: “Me estrené en el mundo del trail en Rivas, el año pasado, y he decidido repetir. Le cogí mucho cariño. Siempre que pueda, volveré. Fue mi bautismo. Me encanta el ambiente que se vive”. E incrementará la tirada: si debutó con la distancia de 7 km, donde quedó segunda (220 metros de desnivel), ahora enfilará la de 14 km (460 m). Hay una tercera, de 21 km (640 m), novedad este año a petición popular.

“Es un circuito muy divertido y juguetón, en contacto con la naturaleza, con zonas de bosque, curvas peraltadas y constantes subidas y bajadas. No destaca ninguna cuesta prolongada, pero el terreno es un serrucho, sin zonas de descanso. A una persona especializada en ultra trail no le parecerá duro, pero no es un paseo”, describe Javier del Río, uno de los organizadores y precursores de la prueba. De tanto entrenar por los acantilados, huyendo del asfalto, se propusieron regalar a su ciudad su primera carrera de montaña. “Para correr, el cerro del Telégrafo es espectacular, con la dureza ideal para una prueba de perfil medio”, explica este gestor deportivo, que además coordina grupos de entrenamiento personal y practicó el medio fondo en su primera juventud: los 800 y 1.500 metros, enrolado en varios clubes profesionales.

“El tramo de escaleras, en pleno bosque de pinos, fue algo nuevo para mí. ¿Lo mejor? El ambiente y el recorrido”, recuerda Ana Mancebo, de 30 años, psicóloga de recursos humanos y habitante del barrio madrileño del Pilar. Aunque arrastra molestias desde diciembre, con un pequeño neuroma en un pie, regresará a Rivas, donde se colgó la medalla de bronce en 2019.

Su pasión es airearse por la montaña: subir, por ejemplo, desde el valle de la Barranca (1.400 m) a La Maliciosa (2.227 m) o el Alto de las Guarramillas (2.258 m), en la sierra de Guadarrama. “Si me quitan la carrera de montaña me quitan media vida. Mi trabajo es muy estresante. La naturaleza es muy importante. Conocía de pasada Rivas y me sorprendió gratamente”, comenta. Ella es quien dice eso de: “Voy a Rivas aunque esté coja”. También evoca la atmósfera creada: “Había mucha animación, con familias apoyando e insuflando energía”.

BOSQUE Y LIBERTAD
Respirar la libertad del bosque y las montañas, vadear arroyos y coronar cumbres para acariciar los cielos. Es lo que viven quienes tonifican su existencia corriendo por la naturaleza. Vero, la riojana nómada que ahora vive en Gran Canarias tras residir en Alemania, Malta, Portugal o Irlanda, lo describe así: “Correr por la montaña es algo emocional. Lo mío es el buceo. Me sumerjo en el agua y no pienso en la tierra, aparco los problemas. Pero bucear requiere desplazamientos largos si no vives cerca del mar. Con el trail running experimento esa misma sensación: solo disfruto. Subes una cima, miras a tu alrededor y los males se van”.

En la isla donde vive, las serranías quedan a un palmo de casa: “Es el paraíso para el trail, con lugares como el pico del Rayo o los pueblos de Tejeda y Terror”. De Madrid, recuerda sus escaladas en La Pedriza: también se anudaba cuerdas y arneses para gatear por el granito.

Y aunque la orografía ripense no es la sierra de Guadarrama ni el edén isleño, esconde sus secretos. Lo dice Javier del Río, oriundo del barrio de Covibar: “Tenemos la imagen de Rivas como una zona seca, pero desde los acantilados se vislumbran panorámicas de humedales y lagunas, que adquieren tonalidades diferentes”. Lo dice alguien que patea esas elevaciones terrizas desde los 14 años. “Gente que lleva tiempo viviendo en la ciudad no conoce tales parajes. Y eso nos toca un poco la fibra. Ese es otro objetivo de la carrera: dar a conocer nuestro entorno a través del deporte”. Porque Rivas exhibe magníficos oteadores y balconadas sobre los acantilados del Parque Regional del Sureste, modesto rincón natural que merece la pena descubrir: ya sea corriendo, pedaleando o caminando, porque cualquier viaje en la vida empieza con un paso.

Te puede interesar

Últimas noticias / Deporte

Últimos vídeos / Deporte

BUSCAR NOTICIAS

ACCESOS DESTACADOS

TRANSPARENCIA

RIVAS AL DÍA

RIVAS CULTURAL

AHORA EN PORTADA

ZBE: el camino a las 'zonas de bien estar'

ZBE: el camino a las ‘zonas de bien estar’

TRÁMITES DESTACADOS

Documento informativo que indica la residencia y el domicilio habitual.

Puede consultar todo lo relacion con sus tributos

Realizar el pago de impuestos y tasas on-line

Presentar escritos o comunicaciones dirigidas al Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid

OFICINAS DEL SERVICIO DE ATENCIÓN A LA CIUDADANÍA

SUBIR