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Pincha más abajo, en ‘Galería de imágenes’, para ver las fotos de la afición con las jugadoras subcampeonas de Europa. A pesar del retraso de más de dos horas en el aterrizaje del vuelo, la afición esperó a las integrantes hasta las 23.30 para brindarle su aplauso y cariño.
El Rivas Ecópolis ha protagonizado una de las mayores gestas del baloncesto europeo de todos los tiempos. Iba de cenicienta a la final a ocho en Estambul y, tras imponerse a los ricos turcos (Galatasaray y Fenerbahce) y al más modesto italiano Baretta-Familia, consiguió llegar a la final, donde sucumbió con muchísima diginidad ante otro equipo español, el Ros Casares Valencia, que lo cuatriplica en presupuesto.
Era la primera vez en la historia del baloncesto continental, tanto masculino como femenino, que dos equipos españoles disputaban una final de Euroliga. El Rivas Ecópolis ha puesto en el mapa de Europa a una ciudad de apenas 75.000 habitantes. Rivas se ha codeado con urbes como Moscú, Ekaterimburgo, Estambul, Cracovia o Valencia. Casi nada.
