DOMINGO 24 ABRIL / 20.00.
Auditorio Pilar Bardem. 5 euros.
Venta: web entradas.rivasciudad.es, y taquilla del auditorio (jueves y viernes, de 19.00 a 21.00, y días con función desde una hora antes).
“Estábamos en plena pandemia, ensayando telemáticamente el montaje de ‘Unicornios’, que estrenamos hace poco más de un año con el municipio confinado. Mientras releíamos en casa textos de teatro -¡qué vicio!-, volvió a aparecer ‘¡Ay, Carmela!”. Así relata el grupo Unicornio Teatro el primer fogonazo creativo que dio origen a la representación del montaje con el que llega al auditorio Pilar Bardem el domingo 24 de abril (20.00), dentro de la novena Muestra Local de Artes Escénicas.
La compañía dice: “¿Por qué ‘¡Ay, Carmela!’? Fácil, porque José Sanchis Sinisterra escribió un texto poético, fascinante, vivo, que habla de la guerra civil y de todas las guerras, que es dramática como la cruenta batalla de Belchite, en el frío invierno del 38, pero es también cómica y disparatada como lo es, a veces, la propia vida. Porque es una historia de bandos ideológicamente enfrentados con la ferocidad de las armas, pero es mucho más. Es una historia de valores y lucha por la vida. Es un grito por la dignidad. Y es también, una historia de amor en un flashback que mezcla recuerdo, sueño, verdad y ficción: la historia de dos pobres cómicos que tan solo se tienen el uno al otro, y que sobreviven con sus varietés en un contexto brutal donde suena, implacable, el ruido de los fusiles”.
Unicornio Teatro reconoce que este montaje les ha conducido, casi sin darse cuenta, “a un proyecto poético y musical fascinante”. Y añaden: “Hemos querido contar y cantar, desde el atrevimiento y el amor, un tiempo, un sonido, que forma parte de nuestras vidas, un pequeño homenaje a quienes vivieron y sufrieron el desgarro de una época”. La primera vez que se representó el texto de Sinisterra fue en noviembre de 1987, en el Teatro Principal de Zaragoza, bajo la dirección de José Luis Gómez, quien también interpretó el papel de Paulino, y Verónica Forqué, que encarnó a Carmela.
