Desde la creación de Lendakaris Muertos en 2004, el pamplonés Aitor Ibarretxe pone la voz y escribe las letras del grupo de punk navarro. Siempre a caballo entre la protesta y el cachondeo, sus canciones hablan de temas que atravesaron su generación, como las drogas o el terrorismo. Con todo lo vivido en el último año, han encontrado inspiración para un nuevo disco con el que seguir dando guerra con temas como ‘Cóctel molotov al chivato del balcón’. Tras el parón por la pandemia, vuelven a los escenarios y actúan en Rivas el viernes 21 de mayo (20.00, auditorio Pilar Bardem, entradas aquí: 15 euros anticipada; 18 euros día del concierto).
¿Cómo ven al público tras la pandemia: le cuesta animarse o tienen más ganas?
Después de un año encerrada, la gente tiene muchas ganas de volver a una situación normal y poder salir. Veo la pandemia como un tema de gente rica y gente pobre. Al final, quienes pagamos somos las personas pobres, y ahí estamos en casa. Porque las personas ricas siguen yendo a sus campos de golf y a sus yates. La gente pobre tenemos que conformarnos con nada.
Una canción del nuevo disco es ‘Cóctel molotov al chivato del balcón’. ¿Le molestaban estas personas?
El disco habla del virus, pero sobre todo de la repercusión que ha tenido, con un poco de cachondeo. A mucha gente esto le ha puesto las cartas sobre la mesa. La vecina de un amigo se compró un megáfono y unos prismáticos y en plena cuarentena estaba vigilando a todo el mundo. A muchas personas de izquierdas que siempre han denunciado la represión policial o la falta de libertades, ahora no las oigo. Vale, hay un tema de seguridad, de salud, pero, tranquilamente, puedes hacer alguna denuncia.
El nuevo disco se titula ‘Miedo a un planeta plano’, con canciones como ‘Reptilianos’ o ‘Miguel Bosé’. ¿Qué querían transmitir?
Eso fue más que nada una pedrada mía. Dentro del grupo tenemos distintos puntos de vista sobre lo que ha pasado, yo puedo hablar de la mía. No tengo nada en contra de Miguel Bosé, me pareció un tío valiente con lo que dijo, sabiendo que se te va a echar todo el mundo encima. Si alguien quiere argumentar algo en contra de la situación, todo el mundo te pone su ejemplo, es la figura que han puesto ahí. Entre Bosé y la gente crítica con lo que está ocurriendo hay un abismo. Ni blanco ni negro.
¿Qué piensa de los juicios o las cancelaciones de conciertos a artistas por herir sensibilidades?
Me parece mal, me imagino que como a cualquiera. O a cualquiera de izquierdas. Sin ir más lejos, el tema de Pablo Hasél, que ahora mismo estará mirando el techo de su celda. Vivimos en un país muy polarizado políticamente, y tienen que pasar muchas generaciones para que todo eso se vaya curando, son temas que vienen de la guerra civil y la dictadura. Siempre va a haber gente que se indigne con lo que uno cante, pero para eso está la libertad de expresión. Si un grupo canta algo que a mí no me gusta, que lo cante. Cuando encarcelan a artistas quieren dar ejemplo, escarmiento.
Es el letrista del grupo.
¿Ha pensado al escribir alguna canción ‘esto no lo puedo decir’?
Alguna vez sí. Una canción la dejé de hacer por eso, no voy a decir cuál. Está ahí en el cajón y algún día saldrá. Al final, nuestras letras son un poco de cachondeo, y te da un poquito más de holgura para encajar cosas. Y si no, le buscas la vuelta diciéndolo de otra manera. Siempre ha habido censura y siempre ha habido maneras de saltársela.
¿Nota el paso de los años a la hora de componer los temas?
La edad a la hora de hacer canciones se nota, quien sigue con 50 igual que con 20 algo ha hecho mal. En los primeros discos no había canciones de amor, pero luego siempre salía alguna. Sobre todo cuando empiezas a hablar de sexo, ahí ya se nota que estás viejo. Normalmente las canciones de Lendakaris tienen varios pilares: las drogas, el problema vasco… Otro eje era el amor, la mayoría de canciones populares hablan de amor o desamor. Pues sí, ya soy un señor mayor, como Miguel Bosé.
¿Cómo ve el futuro del punk?
El punk de hoy en día es el hip hop. Al final el punk te venía a decir que no tenías que saber tocar un instrumento ni cantar bien para montar un grupo. En el hip hop veo un poco lo mismo. Puedes hacer un disco entero en tu cuarto, es una revolución muy grande. El punk tuvo su época dorada en los 80, pero siempre va a estar ahí, arraigado en la cultura popular. Habrá épocas donde tenga menos tirón, otras más, pero siempre habrá gente joven a quien le guste.