Entrevista: Irene Chaparro
Conocido por su destreza musical y su particular sentido del humor, el madrileño Marcos Martínez, Grison para el gran público, lleva tres años siendo ingrediente fundamental en ‘La Resistencia’, uno de los late shows de Movistar+, junto a Ricardo Castella y David Broncano. El cómico murciano Jaime Caravaca, también colaborador del programa, desembarcó en el mundo de la comedia hace más de 15 años con un estilo único de entender el espectáculo. Juntos llegan el sábado 13 de marzo al auditorio Pilar Bardem.
¿Por qué la gente debería ir a verlos al auditorio?
Grison: Nuestro show es un show diferente que no se ha visto. Es bastante particular porque partimos de la improvisación y con elementos que han sido poco explotados en el espectáculo, como el beatbox o la música que hago yo con el loop station. Se monta un ambiente distinto porque es una colaboración con el público. Y esto crea una atmósfera diferente en cada show. Estamos teniendo bastantes sold out [entradas agotadas], y la gente nos da las gracias porque les hemos sacado un poco de los problemas de su vida. Les hacemos desconectar un rato y eso está muy bien.
¿Cómo se llega a ser campeón de España y del mundo del beatbox?
Grison: Es una disciplina muy parecida a la de tocar un instrumento. Hay que echar unas cuantas horas, sobre todo cuando empiezas. Requiere una rutina de entrenamiento, casi como un deporte. Poco a poco le coges el punto y la técnica para no reventarte la voz. Yo empecé en el beatbox en 2005, cuando estaba estudiando la carrera de música. Conseguí trabajo vendiendo loop station por tiendas de música y haciendo demos. Cuando gané el campeonato del mundo en Los Ángeles me dieron un cheque de 3.000 dólares y me quedé disfrutando del premio haciendo un viaje por Estados Unidos.
¿Cómo les ha cambiado la vida ‘La Resistencia’? ¿Cómo es la experiencia desde dentro? Desde fuera lo que se ve parece una auténtica locura.
Grison: Nos ha ayudado a que venga más gente a nuestros bolos, porque la gente nos conoce y vienen con la predisposición de que lo que vamos a hacer mola. Y eso ayuda. Es un escaparate fenomenal para otros trabajos.
Jaime Caravaca: La tele nos ha cambiado la vida como suele cambiarla, aportándonos un poco más de dinero, de visibilidad y de reconocimiento. En cuanto al programa, yo como encargado del pre show, todo lo que salga en pantalla está fuera de guion y yo sigo mi propio criterio. Nosotros vivimos, dentro de ‘La Resistencia, un día a día con nuestra familia y amigos dentro del programa.
¿Siempre se quisieron dedicar al espectáculo o fue algo casual?
Grison: Yo estudié guitarra, me decanté por la música y soy profesor licenciado. Estuve siete años en un colegio, con mi plaza sacada en una oposición, pero aquello no me acababa de llenar y decidí dejar el trabajo y dar el salto a los bolos y la música. Los primeros años fueron difíciles, pero también puedo decir que hemos tenido mucha suerte, además del esfuerzo realizado.
Jaime Caravaca: Yo, desde pequeño, ya me estaba subiendo al escenario, aunque no vengo de familia de artistas. A los nueve años hice un protagonista en el Teatro Romea, el principal teatro de la ciudad de Murcia, pero todavía no estaba motivado como para dedicarme a esto, aunque ya sabía que me gustaba. Años después me enteré de que existía la carrera de arte dramático. Decidí estudiarla. Pero la comedia le ganó a todo. Y ya llevo 18 años dedicándome a esto.
Están acostumbrados al contacto con el público, tanto en la tele como en sus espectáculos. ¿Cómo es esa cercanía con la gente?
Jaime Caravaca: A mí me gusta la gente. Todos y todas somos únicos y únicas, y eso hace que cada espectáculo te ofrezca la posibilidad de rascar en el público. Me parece que los espectáculos al estilo monologuista de guion se pierde esa relación. Es importante que te preocupes por la gente que ha venido a verte, para crear una comedia colectiva, que el público pueda participar y aportar.
Grison: Personalizar el espectáculo cada día hace que la gente se sienta especial. Y así les hacemos un poco más felices.
¿Es esta sea una época difícil para hacer comedia como la suya, con ese tono gamberro y arriesgado?
Grison: No, al contrario. La gente se está dando cada vez más cuenta de que el humor es humor. Puedes hacer un chiste con un asesino, pero nosotros no hemos matado a nadie. Haciendo un chiste de ese estilo, estás denunciando la situación, haciendo que eso no se olvide.
Jaime Caravaca: Como decía Darío Adanti: “No disparen al humorista”. El humor es duro porque depende de las circunstancias de cada persona. Hay gente que no tiene límite y hay gente con la cuerda muy cortita, pero eso depende de cada cual. Nosotros no podemos hacernos cargo del drama personal de cada uno.
¿Planes para 2021?
Jaime Caravaca: El programa, la gira con nuestro espectáculo y algunas cuantas cositas que todavía están por cerrar. No nos podemos quejar.
