Texto: Eugenio G. Delgado
La Asociación Lareira asegura que es necesaria e imprescindible una perspectiva de género para fomentar el feminismo y la igualdad en el tejido social ripense, además de promover valores basados en el respeto, la diversidad y la cultura. Y con estos propósitos nació el colectivo en 2017, impulsado por cuatro vecinas de la ciudad: Elena Jiménez Terreros, Miriam León Infantes, Eva María Álvarez Moreno y Débora Fernández Léon.
Su primer proyecto se desarrolló durante los dos últimos trimestres del curso pasado en los institutos locales Julio Pérez y Europa bajo el nombre de ‘El patriarcado en el lenguaje musical: rompiendo moldes’.
«Acudimos a clases de 3º de la E.S.O. (Educación Secundaria Obligatoria) porque los 15 años son una época clave para educar a las chicas y chicos en igualdad. Queríamos demostrarles, a través de las letras de las canciones y de videoclips, que no sólo el reguetón es machista. En general, lo son todos los estilos musicales», comenta Débora.
Estas cuatro mujeres reconocen que «lo más complicado fue hacer entender a los chicos que esta iniciativa no es algo personal contra ellos, sino contra un sistema establecido, patriarcal y machista». «Al final, tanto ellos como ellas acabaron muy contentos: nos daban la gracias, nos contaban sus experiencias y nos pedían consejos para asuntos concretos. De esta forma, el alumnado se convierte en protagonista mediante dinámicas participativas para conseguir una actitud crítica y consciente frente al machismo en su entorno», recuerdan.
Continuando esta línea de trabajo, el sábado 20 de octubre celebran una jornada de puertas abiertas para personas de 18 a 30 años, en el salón del Área Social del Parque de Asturias, que añade a la música el análisis del lenguaje patriarcal en el cine.
UNA GOTA EN UN ESTANQUE
Débora es optimista respecto a los resultados: «Después de años en la lucha feminista, yo sí he visto cambios en mi entorno. Es una gota en un estanque que se va extendiendo. Cuando siembras en igualdad, todas las personas que te rodean se empapan y el movimiento crece. Estoy convencida de que los cambios tienen que venir desde abajo y eso es lo que estamos haciendo».
«Los hombres deben analizar cuáles son sus privilegios y cómo renunciar a ellos en busca de mayor justicia social e igualdad. Y las mujeres debemos recuperar el amor propio. Te enseñan a no tenerlo desde pequeñita y a aguantarte con lo que hay. Debemos romper esos roles sociales y educar en igualdad y feminismo», señalan desde la asociación.
El movimiento Lareira es intergeneracional e interprofesional, ya que Débora tiene 23 años, es estudiante de Historia y monitora de ocio y tiempo libre; Eva tiene dos más, habiéndose formado en el campo de la política y las ciencias sociales; Miriam, la madre de Débora, es administrativa y ha cumplido 52 años, y Elena tiene 50 y es psicóloga.
LA GRAN FIESTA DE LAS ASOCIACIONES
Otra importante razón que explica el nacimiento de la Asociación Lareira es la convicción que tienen de «crear tejido social de barrio y una red de colaboración sólida para servir así de plataforma para poner en marcha proyectos e ideas tanto de colectivos como de vecinas y vecinos, u otras asociaciones que quieran contactar con ellas». «Vivimos en un mundo que te empuja a ser individualista y nosotras queremos poner en valor el trabajo en grupo y la comunidad», comenta Débora.
El nombre del colectivo, ‘Lareira’, una palabra gallega, hace referencia a esa chimenea dentro de la casa en torno a la cual la familia se une para calentarse y para cocinar. «Queremos que nuestro proyecto arrope y acompañe a otros y que se convierta en un espacio alrededor del cual todas y todos crezcamos como personas y como asociaciones», explica Débora.
Esta idea se plasma el sábado 6 de octubre en las pistas del parque Bellavista con el En Órbita Festival, el primer festival de asociaciones de Rivas, impulsado y organizado por la Asociación Lareira y en el que desde las 12.00 del mediodía se podrán disfrutar de 14 horas de poesía, teatro, talleres, baile, música en vivo, artesanía, cuentacuentos y actividades deportivas.
«Es la macrofiesta del tejido asociativo y social de la ciudad. Rivas es la ciudad del asociacionismo, pero muchas veces los colectivos y asociaciones no se conocen entre sí, así que pensamos que era bueno para todas y todos promover un día en el que cada una enseñara lo que hace y crear un espacio de confluencia. En total, 28 asociaciones y colectivos para seguir construyendo una ciudad mejor, más participativa y social», destaca Débora.
